La sabidurÃa que viene de Dios
Biblia cristiana > Nuevo Testamento > EpÃstolas > EpÃstola de Santiago > La sabidurÃa que viene de Dios (59:1:2 - 59:1:11)
Hermanos mÃos, tenedlo por sumo gozo cuando os encontréis en diversas pruebas,
sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.
Pero que la paciencia tenga su obra completa para que seáis completos y cabales, no quedando atrás en nada.
Y si a alguno de vosotros le falta sabidurÃa, pÃdala a Dios, quien da a todos con liberalidad y sin reprochar; y le será dada.
Pero pida con fe, no dudando nada. Porque el que duda es semejante a una ola del mar movida por el viento y echada de un lado a otro.
No piense tal hombre que recibirá cosa alguna del Señor.
El hombre de doble ánimo es inestable en todos sus caminos.
El hermano de humilde condición, glorÃese en su exaltación;
pero el rico, en su humillación, porque él pasará como la flor de la hierba.
Pues se levanta el sol con su calor y seca la hierba, cuya flor se cae, y su bella apariencia se desvanece. De igual manera también se marchitará el rico en todos sus negocios.