Libros Poéticos y Sapienciales

Una herencia escogida. Mictam de David.

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Poéticos y Sapienciales > Salmos > Una herencia escogida. Mictam de David. (19:16:1 - 19:16:11)

(Mictam de David) Guárdame, oh Dios, porque en ti me he refugiado.

Oh alma mía, dijiste a Jehovah: “¡Tú eres el Señor! Para mí no hay bien aparte de ti.

Para con los santos que están en la tierra, y para con los íntegros, es toda mi complacencia.”

Se multiplicarán los dolores de quienes se apresuran tras otro dios. Yo no ofreceré sus libaciones de sangre, ni con mis labios mencionaré sus nombres.

Oh Jehovah, porción de mi herencia, y mi copa, ¡tú sustentas mi destino!

Los linderos me han tocado en lugar placentero; es hermosa la heredad que me ha tocado.

Bendeciré a Jehovah, que me aconseja; aun en las noches me corrige mi conciencia.

A Jehovah he puesto siempre delante de mí; porque está a mi mano derecha, no seré movido.

Por tanto, se alegró mi corazón, y se gozó mi lengua. También mi cuerpo descansará en seguridad.

Pues no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción.

Me mostrarás la senda de la vida. En tu presencia hay plenitud de gozo, delicias en tu diestra para siempre.

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Plegaria pidiendo protección contra los opresores. Oración de David.

Imagen Plegaria pidiendo protección contra los opresores. Oración de David. 1
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Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Poéticos y Sapienciales > Salmos > Plegaria pidiendo protección contra los opresores. Oración de David. (19:17:1 - 19:17:15)

(Oración de David) Escucha, oh Jehovah, una causa justa; atiende a mi clamor. Presta oído a mi oración que es de labios sin engaño.

Proceda de tu presencia mi vindicación; vean tus ojos la rectitud.

Tú has examinado mi corazón; me has visitado de noche. Me has probado y nada infame has hallado, porque me he propuesto que mi boca no se exceda.

En cuanto a las obras de los hombres, por la palabra de tus labios me he guardado de las sendas de los violentos.

Mis pasos se han mantenido en tus caminos, para que mis pies no resbalen.

Yo te invoco, porque tú oirás, oh Dios. Inclina a mí tu oído; escucha mi palabra.

Muestra tus maravillosos actos de misericordia, tú que a los que confían libras con tu diestra de los que se levantan contra ti.

Guárdame como a la niña de tu ojo; escóndeme bajo la sombra de tus alas

de la vista de los impíos que me oprimen, y de mis enemigos mortales que me rodean.

Ellos están protegidos con su propio sebo; con su boca hablan con soberbia.

Han rodeado nuestros pasos; sobre nosotros ponen sus ojos para echarnos por tierra.

Se parecen al león que anhela la presa, o al cachorro de león que se agacha en secreto.

¡Levántate, oh Jehovah! ¡Hazle frente! ¡Somételo! Con tu espada libra mi alma de los impíos.

Oh Jehovah, líbrame con tu mano de los hombres, de los hombres de este mundo, cuya parte está en esta vida; cuyos vientres llenas con tus tesoros, cuyos hijos se sacian y aun dejan para sus pequeños.

En cuanto a mí, en justicia veré tu rostro; quedaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza.

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Acción de gracias por la victoria. Al músico principal. Salmo de David, siervo de Jehová, el cual dirigió a Jehová las palabras de este cántico el día que le libró Jehová de mano de todos sus enemigos, y de mano de Saúl. Entonces dijo:

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Poéticos y Sapienciales > Salmos > Acción de gracias por la victoria. Al músico principal. Salmo de David, siervo de Jehová, el cual dirigió a Jehová las palabras de este cántico el día que le libró Jehová de mano de todos sus enemigos, y de mano de Saúl. Entonces dijo: (19:18:1 - 19:18:50)

(Al músico principal. De David, siervo de Jehovah, quien dirigió a Jehovah las palabras de este cántico, el día que Jehovah le libró de mano de todos sus enemigos, y de mano de Saúl. El dijo:) Te amo, oh Jehovah, fuerza mía.

Jehovah es mi roca, mi fortaleza y mi libertador. Mi Dios es mi peña; en él me refugiaré. El es mi escudo, el poder de mi liberación y mi baluarte.

Invocaré a Jehovah, quien es digno de ser alabado, y seré librado de mis enemigos.

Me rodearon los dolores de la muerte, y los torrentes de la perversidad me atemorizaron.

Me rodearon las ligaduras del Seol; me confrontaron los lazos de la muerte.

En mi angustia invoqué a Jehovah y clamé a mi Dios. El oyó mi voz desde su templo, y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.

La tierra se estremeció y tembló; se conmovieron los cimientos de las montañas. Se estremecieron, porque él se airó.

Humo subió de su nariz; de su boca salió fuego consumidor, y carbones encendidos saltaban de él.

Inclinó los cielos y descendió; una densa oscuridad había debajo de sus pies.

Cabalgó sobre un querubín y voló; se remontó sobre las alas del viento.

Puso tinieblas alrededor de sí como su morada secreta; su cubierta es oscuridad de aguas y densas nubes.

Por el resplandor de su presencia fueron atravesadas las nubes, por el granizo y los carbones de fuego.

Jehovah tronó en los cielos; el Altísimo dio su voz: granizo y carbones de fuego.

Envió sus flechas y los dispersó; arrojó relámpagos y los desconcertó.

A tu reprensión, oh Jehovah, por el soplo del aliento de tu nariz, se hicieron visibles los lechos de las aguas, y se descubrieron los cimientos del mundo.

Envió desde lo alto y me tomó; me sacó de las aguas caudalosas.

Me libró de mi poderoso enemigo y de los que me aborrecían, pues eran más fuertes que yo.

Se enfrentaron a mí el día de mi desgracia, pero Jehovah fue mi apoyo.

El me sacó a un lugar espacioso; me libró, porque se agradó de mí.

Jehovah me ha pagado conforme a mi justicia; conforme a la limpieza de mis manos me ha recompensado.

Porque he guardado los caminos de Jehovah, y no me he apartado impíamente de mi Dios.

Porque delante de mí han estado todos sus juicios, y no he apartado de mí sus estatutos.

Fui íntegro para con él, y me guardé de mi maldad.

Por tanto, Jehovah me ha recompensado conforme a mi justicia, conforme a la limpieza de mis manos ante sus ojos.

Con el misericordioso te muestras misericordioso, e íntegro con el hombre íntegro.

Con el limpio te muestras limpio, y eres sagaz con el perverso.

Salvas al pueblo humilde, y humillas los ojos altivos.

Ciertamente haces que mi lámpara alumbre. Jehovah, mi Dios, ilumina mis tinieblas.

Contigo desbarataré ejércitos; con mi Dios saltaré murallas.

Perfecto es el camino de Dios; probada es la palabra de Jehovah. El es escudo a todos los que en él se refugian.

Porque, ¿quién es Dios fuera de Jehovah? ¿Quién es Roca aparte de nuestro Dios?

Dios es el que me ciñe de vigor, y hace perfecto mi camino.

Hace que mis pies sean ágiles como los del venado, y me mantiene firme sobre mis alturas.

Adiestra mis manos para la batalla; así mis brazos pueden tensar el arco de bronce.

Me has dado el escudo de tu salvación; tu mano derecha me ha sustentado, y tu condescendencia me ha engrandecido.

Tú has ensanchado mis pasos debajo de mí, para que no tiemblen mis tobillos.

Perseguí a mis enemigos y los alcancé; no volví sino hasta acabarlos.

Los golpeé, y no pudieron levantarse; cayeron debajo de mis pies.

Me ceñiste de poder para la batalla; doblegaste a mis enemigos debajo de mí.

Hiciste que mis enemigos me dieran las espaldas, y destruí a los que me aborrecían.

Clamaron, pero no hubo quien los salvase. Clamaron a Jehovah, pero él no les respondió.

Los desmenucé como polvo ante el viento; los deshice como lodo de la calle.

Tú me libraste de las contiendas del pueblo, y me pusiste como jefe de las naciones. Aun los pueblos que yo no conocía me sirvieron.

Apenas oían de mí, me rendían obediencia. Los hijos de los extranjeros me adulaban.

Los hijos de los extranjeros se desvanecían y salían temblando de sus escondrijos.

¡Viva Jehovah! ¡Bendita sea mi Roca! Sea ensalzado el Dios de mi salvación,

el Dios que ejecuta mi venganza; sujeta a los pueblos debajo de mí

y me libra de mis enemigos. Tú me has enaltecido sobre mis adversarios, y me has librado del hombre violento.

Por eso te confesaré entre las naciones, oh Jehovah, y cantaré salmos a tu nombre.

El engrandece las victorias de su rey y muestra misericordia a su ungido: a David y a sus descendientes, para siempre.

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Las obras y la palabra de Dios. Al músico principal. Salmo de David.

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Poéticos y Sapienciales > Salmos > Las obras y la palabra de Dios. Al músico principal. Salmo de David. (19:19:1 - 19:19:14)

(Al músico principal. Salmo de David) Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos.

Un día comunica su mensaje al otro día, y una noche a la otra declara sabiduría.

No es un lenguaje de palabras, ni se escucha su voz;

pero por toda la tierra salió su voz y hasta el extremo del mundo sus palabras. En ellos puso un tabernáculo para el sol;

y éste, como un novio que sale de su dosel, se alegra como un valiente que emprende la carrera.

En un extremo del cielo está su salida, y en el otro está su punto de retorno. ¡Nada hay que se esconda de su calor!

La ley de Jehovah es perfecta; restaura el alma. El testimonio de Jehovah es fiel; hace sabio al ingenuo.

Los preceptos de Jehovah son rectos; alegran el corazón. El mandamiento de Jehovah es puro; alumbra los ojos.

El temor de Jehovah es limpio; permanece para siempre. Los juicios de Jehovah son verdad; son todos justos.

Son más deseables que el oro, más que mucho oro fino. Son más dulces que la miel que destila del panal.

Además, con ellos es amonestado tu siervo; en guardarlos hay grande galardón.

¿Quién entenderá los errores? ¡Líbrame de los que me son ocultos!

Asimismo, guarda a tu siervo de los arrogantes, que ellos no se enseñoreen de mí. Entonces seré íntegro y limpio de gran rebelión.

Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, oh Jehovah, Roca mía y Redentor mío.

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Oración pidiendo la victoria. Al músico principal. Salmo de David.

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Poéticos y Sapienciales > Salmos > Oración pidiendo la victoria. Al músico principal. Salmo de David. (19:20:1 - 19:20:9)

(Al músico principal. Salmo de David) Jehovah te responda en el día de angustia; el nombre del Dios de Jacob te defienda.

El te envíe ayuda desde su santuario, y te sostenga desde Sion.

Tenga él memoria de tus ofrendas y acepte tu holocausto. (Selah)

El te dé conforme a tu corazón, y cumpla todos tus planes.

Nosotros nos alegraremos por tu salvación, y en el nombre de nuestro Dios alzaremos bandera. Cumpla Jehovah todos tus anhelos.

Ahora reconozco que Jehovah da la victoria a su ungido; le responderá desde su santo cielo con la fuerza liberadora de su diestra.

Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; pero nosotros confiamos en el nombre de Jehovah nuestro Dios.

Ellos se doblegan y caen, pero nosotros nos levantamos y estamos firmes.

¡Salva, oh Jehovah! ¡Que el Rey nos oiga el día en que le invoquemos!

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