La plaga de ranas

Éxodo 8:1 – Éxodo 8:15

Entonces Jehovah dijo a Moisés: —Vé al faraón y dile que Jehovah ha dicho así: «Deja ir a mi pueblo para que me sirva.

Y si rehúsas dejarlo ir, he aquí yo castigaré todo tu territorio con una plaga de ranas.

El Nilo se llenará de ranas, las cuales subirán y entrarán en tu casa y en tu dormitorio, y sobre tu cama. Entrarán en las casas de tus servidores y de tu pueblo. Entrarán en tus hornos y en tus artesas de amasar.

Las ranas subirán sobre ti, sobre tu pueblo y sobre todos tus servidores.»

—Jehovah dijo también a Moisés—: Di a Aarón: «Extiende tu mano con tu vara sobre los ríos, sobre los canales y sobre los estanques; y haz subir ranas sobre la tierra de Egipto.»

Entonces Aarón extendió su mano sobre las aguas de Egipto, y subieron ranas que cubrieron la tierra de Egipto.

Pero los magos hicieron lo mismo con sus encantamientos, e hicieron subir ranas sobre la tierra de Egipto.

Entonces el faraón llamó a Moisés y a Aarón, y les dijo: —Rogad a Jehovah para que quite las ranas de mí y de mi pueblo, y dejaré ir al pueblo para que ofrezca sacrificios a Jehovah.

Y Moisés dijo al faraón: —Dígnate indicarme cuándo he de rogar por ti, por tus servidores y por tu pueblo, para que las ranas sean quitadas de ti y de tus casas, y solamente queden en el Nilo.

Y él dijo: —Mañana. Y Moisés respondió: —Se hará conforme a tu palabra, para que conozcas que no hay otro como Jehovah nuestro Dios.

Las ranas se irán de ti, de tus casas, de tus servidores y de tu pueblo, y solamente quedarán en el Nilo.

Entonces salieron Moisés y Aarón de la presencia del faraón. Y Moisés clamó a Jehovah por el asunto de las ranas que había mandado sobre el faraón.

Jehovah hizo conforme a la palabra de Moisés. Murieron las ranas de las casas, de los patios y de los campos.

Las juntaron en muchos montones, y la tierra apestaba.

Pero viendo el faraón que le habían dado alivio, endureció su corazón y no los escuchó, tal como Jehovah lo había dicho.