La madre y los hermanos de Jesús

San Marcos 3:31 – San Marcos 3:35

Entonces fueron su madre y sus hermanos, y quedándose fuera enviaron a llamarle.

Mucha gente estaba sentada alrededor de él, y le dijeron: —Mira, tu madre, tus hermanos y tus hermanas te buscan afuera.

El respondiendo les dijo: —¿Quién es mi madre y mis hermanos?

Y mirando a los que estaban sentados alrededor de él, dijo: —He aquí mi madre y mis hermanos.

Porque cualquiera que hace la voluntad de Dios, éste es mi hermano, mi hermana y mi madre.

7 comentarios

  3. El señor jesucristo nos muestra q todo hermano en el señor debes prestarle la misma importancia en amor, consejo,enseñanza , cariño como a tus propios seres mas queridos
  4. Desde la época de Cristo, a todos los familiares se les llamaba hermanos, y hoy en día son tíos, primos etc. por lo tanto no se refiere hermanos carnales. En la misma cita bíblica JESUS nos aclara que todos los de buena voluntad que amamos a DIOS somos sus hermanos y así toda mujer, de la misma manera es su madre. y por último, hoy en día llamar hermano o hermana al prójimo, para el Cristiano católico es una distinción y a la vez esta palabra no causa molestia cuando no conocemos su nombre. Gracias por mi comentario.
  5. Yo leo:

    Que su madre hermanos y hermanas lo fueron a buscar y el aparentemente no los recibe, aludiendo que sus únicos hermanos y hermanas eran los que estaban reunidos con él.

    Tal vez su familia verdadera no lo veían como un enviado del cielo y lo buscaban para que recapacitara.

  6. También leí por ahí, que se pensaba que Maria estaba casada con José por segundas nupcias, el la acepto con los hijos del antiguo matrimonio, y que la divinidad del Jesús tal vez se debía a que ella en un viaje sin José quedo embarazada y esta fue la mejor manera de asumir un hijo fuera del matrimonio y no ser repudiada.

    Claro al parecer suena mas lógico que Jesús sea un dios Judío que se auto fecundo, inexplicablemente en una joven judía virgen, para posteriormente morir en uno de las peores muertes de la tortura, asfixiado por su propio peso en una cruz. En busca de la redención de toda la humanidad, incluso de muchas generaciones en adelante, producto de la maldición que el mismo impuso como dios creador de sus criaturas.

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