Para Jose: es cierto jose dios esta siempre que lo necesitamos arlado nuestro dandonos su amor, fuerza cuando creemos que ya no podemos mas el esta ahy tendiendonos su mano, nos ama, nos cuida ,nos protege, nos consuela. no hay amor mas grande que el de dios, y jesus. dios los bendiga y nunca se aparten de el. danny
Dios es lo mas grande de la vida, ii lo mas hermoso que hay! su amor es grande es sin fin. y nunca se acaba. Gracias Dios por esta vida . por qe sos lo mejor qe tengo . tu amor me ha enseñado a amar a los demas. y tu eres el unico qe me da fuerza para seguir adelante, por eso gente no se aparten de su camino, ii busquen de el, tiene mucho amor para cada uno de nosotros. Saludos y muchas bendiciones, Carla de junin.
DIOS ES AMOR PAZ Y DOMONIO SOBRE TODOS Y TODAS LOS Q EN EL CONFIAMOS
¿se equivoco jehová al dictar el quinto mandamiento?
dice no mataras pero en nombre de la religión se mata a la gente cruzadas inquisición los SUICIDIOS COLECTIVOS PROVOCADOS por las sectas evangélicas guerreros de allá brujas de salen acaso se cometió algún error de transcripción pues el quinto mandamiento seria así SI MATARAS EN NOmbre de Dios
No sólo eso, es que el propio Jehová mata:
1. Un Diluvio Universal que acabó con muchas criaturas inocentes tales como, animales, niños (¿existió alguna vez una población mundial de infantes perversos?) y sobre todo bebés y fetos: GÉNESIS 7 Y 8 2; 2 PEDRO 2:5.
2. Destrucción total de Sodoma y Gomorra, sigo preguntando ¿Existieron alguna vez grupos étnicos cuyas poblaciones infantiles eran perversas en su totalidad? GÉNESIS 19; 2 PEDRO 2:6; JUDAS 1:7
3. Causa directa de la transformación en Estatua de Sal de una mujer inocente (la esposa de Lot): GÉNESIS 19:26.
4. Asesinato de un hombre que se negaba a tener relaciones sexuales con su cuñada viuda, y para evitarlo se masturbaba: GÉNESIS 38:1-10.
5. Plagas, llamadas “Maravillas” por el propio Jehová, hacia seres inocentes de Egipto, tales como ancianos, mujeres, animales y niños (¿Tiene caso sacrificar niños?): ÉXODO 7:1-14, 9:14-16, 10:1-2, 11:7; JUDAS 1:5.
6. Aniquilación (“maravilla”) hacia todos los primogénitos en la tierra de Egipto, incluyendo niños: ÉXODO. 12:29; JUDAS 1:5.
7. Causa directa del extermino de un ejército egipcio, mediante su inmersión en las aguas del Mar Muerto: ÉXODO 14:21-28; JUDAS: 1:5.
8. Desastre por medio de Granizo en campos egipcios: ÉXODO 9:22-25.
9. Plaga hacia seres humanos: NÚMEROS 11:33.
10. Lepra hacía una mujer (Miriam) por intrigar contra Moisés: NÚMEROS 12:1-10.
11. Abrir la Tierra, mediante Moisés, para tragarse a una población entera (con todo y sus niños… ¿perversos?) por rebeldía: NÚMEROS 16:27-33.
12. Genocidio de 250 hombres por incineración: NÚMEROS 16:35.
13. Genocidio de 14,700 personas por medio de una plaga mortal: NÚMEROS 16:49.
14. Ataque mortal de serpientes de fuego hacia pobladores israelitas (¿cómo no se le ocurrió a Hitler?): NÚMEROS 21:6.
15. Genocidio de 24,000 personas por medio de una plaga mortal: NÚMEROS 25:9 –11.
16. Apoyo logístico para masacrar a Sehón, sus hijos, y su pueblo y después saquearlos: DEUTERONOMIO 2: 32-35.
17. Apoyo logístico para masacrar a Og y a todo su pueblo DEUTERONOMIO 3:2-3.
18. Apoyo Logístico para masacrar y saquear a 6 pueblos: DEUTERONOMIO 20:1 al 21:3.
19. Intimidación masiva hacía el pueblo Israelí: DEUTERONOMIO:28 (todo el capítulo).
20. Posesión del cuerpo de un hombre (Sansón) para despedazar a un león cachorro JUECES 14:5-6.
21. Posesión del cuerpo de un hombre (Sansón) para masacrar a 30 hombres: JUECES 14:19 .
22. Aplicación de tumores en las ingles de los Filisteos (plaga): 1 SAMUEL 5:6-9.
23. Genocidio de 50,070 hombres de Beth-Semes: 1SAMUEL 6:19.
25. Aplastamiento con grandes trozos de granizo de un número indefinido de hombres: JOSUÉ 10:10-11.
26. Asesinato de los “hombres más robustos” de Israel: SALMOS 78:21-31.
27. Castigo con sequía a Israel por 3 años consecutivos a causa de un acto de Saúl: 2 SAMUEL 21:1.
28. Asesinato de dos varones justos: 1 REYES:2:32.
29. Ordena a Jehú asesinar a sobrevivientes de Achâb, mediante Elías: 2 REYES 10:17.
30. Asesinato de Er, hijo de Judá: 1 CRÓNICAS 2:3.
31. Apoyo logístico a los Hijos de Rubén y de Gad para arrasar con cuatro pueblos. 1 CRÓNICAS 5:18-22.
32. Apoyo logístico a David para herir a los Filisteos y a su ganado: 1 SAMUEL 23:2-5
33. Mas Apoyo logístico a David para herir a los Filisteos: 2 SAMUEL 5:23-25.
34. Asesinato de Uzza: 2 SAMUEL6:7.
35. Ordenar Daños a la casa de Achâb por venganza a Jezabel: 2 REYES:9:7.
36. Asesinato de Joachaz mediante una terrible y cruel enfermedad: 2 CRÓNICAS 21:17-19
37. Aplicación de lepra a Azarías: 2 CRÓNICAS 26:20.
38. Amenaza de destrucción al pueblo de Israel: ISAÍAS 10:20-27
39. Amenaza a Pashur de muerte, destrucción y saqueo a sus seres queridos y pueblo, por haber herido a Jeremías: JEREMÍAS 20:1-8.
40. Agresión contra dos falsos profetas: JEREMÍAS 29:21.
41. Derivado de la envidia, amenaza de destrucción, muerte y saqueo al pueblo de Jacob (Sión y Samaria): AMÓS 6.
42. Agresión, con ceguera y aturdimiento, a caballos de Judá y, con locura, a sus jinetes: ZACARÍAS 12:4.
43. Aplicación de plaga desconocida contra los pueblos contrincantes de Jerusalém: ZACARÍAS :14:12.
44. Intimidación por medio de amenaza de plaga hacia Egipcios: ZACARÍAS 14:18.
45. Asesinato de un bebé como castigo a su padre (David), a quien al parecer, le tuvo sin cuidado: 2 SAMUEL: 12:1-19.
46. Genocidio de 70,000 Israelitas por medio de una peste: 2 SAMUEL 24:15.
47. Aniquilación de 50 hombres con fuego del cielo: 2 REYES 1:10-12.
48. Aplicación de ceguera a los Sirios: 2 REYES: 6:18-19.
49. Asesinato con lepra, a Azarías (Rey): 2 REYES 15:3-5.
50. Genocidio de 185,000 Sirios: 2 REYES 19:35.
51. Órdenes de masacrar a “viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres hasta que no quede uno…”: EZEQUIEL: 9:4-6
52. Aniquilación de seres humanos: DEUTERONOMIO 2:15.
53. Destrucción de las tiendas de Jacob y las fortalezas de la hija de Judá: LAMENTACIONES 2:2.
54. Destrucción masiva de Israel: LAMENTACIONES 2:5.
55. Destrucción masiva de los Cananeos: NÚMEROS: 21:3.
Para sergio galiano: te falto algo y bien importante y lo mas importante de toda la escritura y que veo que ignoras a proposito? o por que no te conviene
Entonces Pilato, convocando a los principales sacerdotes, a los Gobernantes, y al pueblo, les dijo: Me habéis presentado a éste como un hombre que perturba al pueblo; pero habiéndole interrogado yo delante de vosotros, no he hallado en este hombre delito alguno de aquellos de que le acusáis. Y ni aun Herodes, porque os remití a él; y he aquí, nada digno de muerte ha hecho este hombre. Le soltaré, pues, después de castigarle. Y
tenía necesidad de soltarles uno en cada fiesta. Mas toda la multitud dio voces a una, diciendo: ¡Fuera con éste, y suéltanos a Barrabás! Éste había sido echado en la cárcel por sedición en la ciudad, y por un homicidio. Les habló otra vez Pilato, queriendo soltar a Jesús; pero ellos volvieron a dar voces, diciendo: ¡Crucifícale, crucifícale! Él les dijo por tercera vez: ¿Pues qué mal ha hecho éste? Ningún delito digno de muerte he hallado en él; le castigaré, pues, y le soltaré. Mas ellos instaban a grandes voces, pidiendo que fuese crucificado. Y las voces de ellos y de los principales sacerdotes prevalecieron. Entonces Pilato sentenció que se hiciese lo que ellos pedían;
y les soltó a aquel que había sido echado en la cárcel por sedición y homicidio, a quien habían pedido; y entregó a Jesús a la voluntad de ellos. Y llevándole, tomaron a cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le pusieron encima la cruz para que la llevase tras Jesús. Y le seguía gran multitud del pueblo, y de mujeres que lloraban y hacían lamentación por él. Pero Jesús, vuelto hacia ellas, les d¼o: H¼as de Jerusalén, no lloréis
por mí, sino llorad por vosotras mismas y por vuestros hijos.
Porque he aquí vendrán días en que dirán: Bienaventuradas las estériles, y los vientres que no concibieron, y los pechos que no criaron. Entonces comenzarán a decir a los montes: Caed sobre nosotros; y a los collados: Cubridnos. Porque si en el árbol verde hacen estas cosas, ¿en el seco, qué no se hará? Llevaban también con él a otros dos, que eran malhechores, para ser muertos. Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Y Jesús decía: Padre, perdónalos,
porque no saben lo que hacen.
Ahora te pregunto yo, por que esta historia no, nos la cuentas tambien
ya que fue Dios que tambien lo hizo, Dios fue el culpable de esta muerte!
podrias explicarnos por que Dios permitio esta muerte de este inocente y Justo hombre?
quien tuvo la culpa de esta muerte? y quienes fueron los, que, lo mataron
tuvo un proposito esta muerte? sabemos que fue Dios el responsable de esta muerte y debes contarla tambien.
me parece que desconoces el evangelio y que no conoces a Dios todopoderoso. y estas senalando mas que conociendo el verdadero proposito de todo lo escrito. te reto a que conoscas a Dios. El Gran Rey.
Sabes? la muerte no es nada. pues Dios resucitara a todos estos muertos
en el dia final asi que no tienes por que angustiarte por la muerte de nadie.
angustiate, por ti, por tu alma, por que entiendas el proposito de lo que esta escrito. Crees tu que Dios desea la muerte de la humanidad. por estos ejemplos que segun la biblia describe que la maldad habita aun en la simiente de los hombres, Por eso nuestro deber como padres es; educar a nuestros hijos en el temor y amor a Dios.
para que no acarreen consecuencias dolorosas para sus vidas y que acaso tambien no has leido que los ninos son de Dios.
vivos y muertos pues su palabra dice que el no es Dios de muertos.
si no de vivos.
oh sea mi querido amigo te hablo de la rresurreccion.
entiendes algo de la resurreccion?
Q. lindos comentarios de verdad, sigan adelante en la obra de Dios.
por tanto nos amo Dios que dio a su unico hunigenito para que todo aquel que en el cree no se pierda mas tenga vida eterna. san juan 3: 16
Dios saco nuestra vida del anonimato.
Q. lindos comentarios de verdad, sigan adelante en la obra de Dios.
por tanto nos amo Dios que dio a su unico hijo hunigenito para que todo aquel que en el cree no se pierda mas tenga vida eterna. san juan 3: 16
Todos los grupos cristianos aceptan la Biblia como texto inspirado por su dios Yahvé (también conocido como Jehová). Para los cristianos protestantes de corte norteamericano, no sólo está inspirada por su divinidad sino que es inerrante en todos los campos, hasta el punto de considerarla «el manual de vida» que Yahvé habría dejado para la humanidad por siempre.
Basándose supuestamente en ella, y escogiendo con cuidado cuáles textos leer en sus púlpitos y cuáles ocultar, los cristianos afirman que su dios es infinitamente bueno, justo y misericordioso. Llegan a decir que «Dios es Amor». Todos ellos sostienen esta visión neotestamentaria: Dios es un Padre amoroso:
«Oísteis que fué dicho: Amarás á tu prójimo, y aborrecerás á tu enemigo. Mas yo os digo: Amad á vuestros enemigos, bendecid á los que os maldicen, haced bien á los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; Para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos: que hace que su sol salga sobre malos y buenos, y llueve sobre justos é injustos. Porque si amareis á los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿no hacen también lo mismo los publicanos? Y si abrazareis á vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿no hacen también así los Gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.» (Mateo 5, 43-48)2
Los creyentes basan su fe en Yahvé como un dios bueno y justo en textos neotestamentarios como este. Pastores, curas y predicadores de toda laya los repiten a diario en sus iglesias, para convencer a sus fieles de que su dios es paradigma de amor y justicia; la base perfecta de cualquier sistema ético, moral o legal. Pero… ¿esto es cierto? ¿el dios de la Biblia es en verdad justo, bueno, «lento a la ira y rico en clemencia»?
Quien no se conforma con escuchar al pastor en su iglesia -quien lee la Biblia personalmente- encuentra numerosos textos que muestran lo contrario. Aunque se podrían citar cientos de pasajes parecidos, sólo se muestra uno que representa bien a Yahvé; el relato se explica solo pero aún así, se harán breves comentarios sobre algunas partes que se resaltan.
Deuteronomio 28,15-51:
«Pero si no obedeces la voz de Yavé, tu Dios, y no pones en práctica todos sus mandamientos y normas que hoy te prescribo, vendrán sobre ti todas estas maldiciones:
Maldito serás en la ciudad y en el campo. Maldita será tu canasta de frutos y tu reserva de pan. Maldito el fruto de tus entrañas y el fruto de tus tierras, los partos de tus vacas y las crías de tus ovejas. Maldito serás cuando salgas y maldito también cuando vuelvas.
Yavé mandará la desgracia, la derrota y el susto sobre todo lo que tus manos toquen, hasta que seas exterminado, y perecerás en poco tiempo por las malas acciones que cometiste, traicionando a Yavé. El hará que se te pegue la peste hasta que desaparezcas de este país que, hoy, pasa a ser tuyo. Yavé te castigará con tuberculosis, fiebre, inflamación, quemaduras, tizón y roya del trigo, que te perseguirán hasta que mueras.
El cielo que te cubre se volverá de bronce, y la tierra que pisas, de hierro. En vez de lluvia, Yavé te mandará cenizas y polvo, que caerán del cielo hasta que te hayan barrido.
Yavé hará que seas derrotado por tus enemigos. Por un camino irás a pelear en su contra y por siete caminos huirás de ellos. Al verte se horrorizarán todos los pueblos de la tierra.
Tu cadáver servirá de comida a todas las aves del cielo y a todas las bestias de la tierra, sin que nadie las corra. Te herirá Yavé con las úlceras y plagas de Egipto, con tumores, sarna y tiña, de las que no podrás sanar.
Te castigará Yavé con la locura, la ceguera y la pérdida de los sentidos. Andarás a tientas en pleno mediodía, como anda el ciego en la oscuridad, y fracasarás en tus empresas. Siempre serás un hombre oprimido y despojado, sin que nadie salga en tu defensa.
Tendrás una prometida y otro hombre la hará suya. Edificarás una casa y no la podrás habitar. Plantarás una viña y no comerás sus uvas. Tu buey será sacrificado delante de ti y no comerás de él. Ante tus ojos te robarán tu burro y no te lo devolverán, tus ovejas serán entregadas a tus enemigos y nadie te defenderá.
Tus hijos y tus hijas serán entregados a pueblos extranjeros y enfermarás con tanto mirar hacia ellos, pero no podrás hacer nada. El fruto de tus campos, todos tus esfuerzos, los comerá un pueblo que no conoces y tú no serás más que un explotado y oprimido toda la vida. Te volverás loco por lo que veas. Yavé te herirá con úlceras malignísimas en las rodillas y en las piernas, de las que no podrás sanar, desde la planta de los pies hasta la coronilla de tu cabeza. Yavé te llevará a ti y al rey que tú hayas elegido a una nación que ni tú ni tus padres conocían, y allí servirás a otros dioses de piedra y de madera. Andarás perdido, siendo el juguete y la burla de todos los pueblos donde Yavé te llevará.
Echarás en tus campos mucha semilla y será muy poco lo que coseches, porque la langosta lo devorará. Plantarás una viña y la cultivarás, pero no beberás vino ni comerás uvas, porque los gusanos la roerán. Tendrás olivos por todo tu territorio, pero no te darán ni siquiera aceite con que ungirte, porque se caerán las aceitunas y se pudrirán.
Tendrás hijos e hijas, pero no serán para ti, porque se los llevarán cautivos . Todos los árboles y frutos de tu tierra serán atacados por los insectos. El forastero que vive contigo se hará cada día más rico, y tú cada día serás más pobre. El te prestará y tú tendrás que pedir prestado; él estará a la cabeza y tú a la cola.
Todas estas maldiciones caerán sobre ti, te perseguirán y oprimirán hasta que hayas sido eliminado, porque no escuchaste la voz de Yavé, tu Dios, ni guardaste sus mandamientos ni las normas que te ordenó. Se apegarán a ti y a tus descendientes para siempre y serán una señal asombrosa a la vista de todos.
Por no haber servido con gozo y alegría de corazón a Yavé, tu Dios, cuando nada te faltaba, servirás con hambre, sed, falta de ropa y toda clase de miseria a los enemigos que Yavé enviará contra ti. Ellos pondrán sobre tu cuello un yugo de hierro hasta que te destruyan del todo.
Yavé hará venir contra ti de un país remoto, como un vuelo de águila, a un pueblo cuya lengua no entenderás. Ese pueblo cruel no tendrá respeto por el anciano ni compasión del niño.
Tras leer este texto 3 «inspirado» es imposible sostener que Dios es todo «Amor». Sería una contradicción enorme: se albergarían dos ideas mutuamente excluyentes en la mente, como en el «doblepensar» orwelliano o en las reglas de «La Compañía de Jesús» fundada por Ignacio de Loyola4 . Si Dios fuera «Amor», no habría dejado plasmar estas injusticias en su «Santa Palabra».
Se pueden examinar algunas citas particularmente inquietantes en este discurso:
«Maldito el fruto de tus entrañas»
La maldición cae sobre los hijos de los infractores. Aunque no hayan hecho nada malo, los hijos pagan por los pecados de sus padres. Que un inocente reciba castigo por lo que hacen otros no es moral ni justo. Un dios que castigara así no podría ser base de ningún sistema ético o legal en una sociedad civilizada.
«El cielo que te cubre se volverá de bronce, y la tierra que pisas, de hierro. En vez de lluvia, Yavé te mandará cenizas y polvo, que caerán del cielo hasta que te hayan barrido.»
Si se cree en el texto, todo ser del territorio ocupado por el pecador, plantas, animales y personas, padecerían la sequía enviada como amonestación. Castigar a un culpable con una medida que afecta incontables inocentes es inmoral. Es una respuesta desproporcionada, similar al bombardeo de una ciudad llena de civiles inocentes como retaliación a la acción puntual de algún morador de la ciudad: simple terrorismo.
«Tu cadáver servirá de comida a todas las aves del cielo y a todas las bestias de la tierra, sin que nadie las corra».
Este versículo ahonda en la personalidad de Yahvé. Siendo omnisciente, debería saber que un cadáver no es una persona y no siente nada. Aún así, en su saña decide vengarse hasta del cuerpo inanimado del pecador: ni siquiera le permite una digna sepultura… lo deja como carroña. Sobre un cadáver es imposible hacer justicia; su profanación sólo muestra venganza enfermiza, semejante a la de los paramilitares colombianos que utilizan motosierras para desmembrar campesinos y luego se ponen a jugar fútbol con las cabezas. 5 No extraña que un pueblo que adora mayoritariamente a Yahvé haya generado esta especie de individuos.
«Tendrás una prometida y otro hombre la hará suya».
Aquí se manifiesta el machismo del dios tribal Yahvé. Para castigar al pecador, Yahvé hace que su prometida inocente sea sometida al oprobio de ser poseída por otro hombre. Aquí la injusticia de Yahvé es doble: no sólo oprime a la mujer sino que la utiliza como un objeto, como un medio para castigar a un tercero: no sólo es venganza sobre el pecador, sino utilización sexual de una inocente como medio de venganza.
«Tus hijos y tus hijas serán entregados a pueblos extranjeros y enfermarás con tanto mirar hacia ellos, pero no podrás hacer nada. (…)Tendrás hijos e hijas, pero no serán para ti, porque se los llevarán cautivos».
Yahvé insiste en derramar su venganza sobre los hijos del infractor para hacerlo sufrir. En la nefanda justicia de este dios, es lícito ensañarse con los hijos inocentes para castigar al padre culpable. Es la misma «justicia» de «Los Pepes» (perseguidos por Pablo Escobar) antes de convertirse en las AUC (Autodefensas Unidas de Colombia). Antes de matar a un enemigo, le asesinaban parientes, empleados, e incluso hijos de sus empleados para hacerle experimentar el mayor dolor y pánico posible6 . Es la versión local del conocido aforismo: «démosle primero donde más le duela». Este tipo de «justicia» es sólo una imitación los métodos de Yahvé para saciar su «santa» sed de sangre. Parece que los Pepes sólo seguían el mandato de Jesús de ser «perfectos como el Padre Celestial es perfecto»… perfectos en la venganza insaciable.
«Todas estas maldiciones(…) Se apegarán a ti y a tus descendientes para siempre y serán una señal asombrosa a la vista de todos».
Ahora la venganza se extiende de los hijos a todos los descendientes; la expresión «para siempre» da mejor perspectiva de la naturaleza de Yahvé. Incluso cuando el infractor ya no existe y no puede sufrir por los males que experimenta su familia, Yahvé se ensaña sobre los descendientes, no sólo para saciar su «furia santa», sino para dejar un precedente eterno de lo que le ocurre a los infractores. De nuevo Yahvé usaría incontables inocentes como valla publicitaria de su ira. Otra vez las personas usadas como medio de expresión de la «rabieta» divina.
«Yavé hará venir contra ti de un país remoto, como un vuelo de águila, a un pueblo cuya lengua no entenderás. Ese pueblo cruel no tendrá respeto por el anciano ni compasión del niño».
A medida que avanza el texto, se va haciendo más clara la naturaleza demoníaca del dios que los cristianos proponen como base absoluta de la ética y la moral humana… Aquí, no basta que a los hijos del infractor se les haga pagar; tampoco bastan los descendientes, aunque se los castigue «por siempre»… No: ¡La sed insaciable de sangre de Yahvé exige también los vecinos inocentes del pecador! Alguien peca y Yahvé manda una invasión extranjera que no respeta ni a viejos ni a niños del pueblo del infractor. ¡El pueblo entero paga lo que hace un individuo! Es otro intento infructuoso de ese dios tribal hebreo para aplacar su sed insaciable de sangre. 7
Pero el primer puesto en depravación extrema se lo llevan los versos 52 a 59. Es mejor leerlo en las propias palabras inspiradas por Yahvé:
«Te asediarán en todas tus ciudades, hasta que caigan en todo tu país las murallas más altas y fortificadas en las que tú ponías tu confianza. Quedarás sitiado dentro de tus ciudades en todo el país que te da Yavé, tu Dios. Te comerás el fruto de tus entrañas, la carne de tus hijas e hijos que te haya dado Yavé, en el asedio y angustia a que te reducirá tu enemigo.
El hombre más refinado de tu pueblo se esconderá de su hermano e incluso de su esposa y de los hijos que le queden, negándose a compartir con ellos la carne de los hijos que se estará comiendo, porque nada le quedará durante el asedio y la angustia a que tu enemigo te reducirá en todas tus ciudades. La mujer más tierna y delicada de tu pueblo, tan delicada y tierna que hacía ademanes para posar en tierra la planta de su pie, se esconderá del hombre que se acuesta con ella, e incluso de su hijo o de su hija, mientras come la placenta salida de su seno y a los hijos que dio a luz, por falta de todo otro alimento, cuando tu enemigo te sitie en tus ciudades y te reduzca a la más extrema miseria. Si no guardas ni pones en práctica las palabras de esta Ley tales como están escritas en este libro, y no temes a ese Nombre glorioso y terrible, a Yavé, tu Dios, él te castigará, a ti y a tus descendientes, con plagas asombrosas, plagas grandes y duraderas, enfermedades malignas e incurables».
Un lector ético que haya seguido estos pasajes bíblicos debió pasar por el punto de las bascas hace mucho rato: aquí, Yahvé envía un asedio extranjero que causa tal hambruna, que «hombres refinados y mujeres dulces» del pueblo del infractor se ven en la necesidad de comerse a sus propios hijos. Es de una morbosidad horripilante: no basta que Yahvé derrame su venganza sobre los hijos del infractor, ni sobre sus descendientes, ni siquiera sobre los vecinos inocentes del infractor… ¡también es necesario que estos se coman a sus propios hijos por hambre! 8
Pocas veces, si alguna, se ha llegado a una forma tan escalofriante y macabra de ejecutar una venganza. ¡Hacerle comer su placenta y sus hijos a una mujer inocente, vecina de un infractor, para que pague el infractor! Esta manera de «hacer pagar» no se le ocurrió ni a Pablo Escobar durante la época del Cartel de Medellín. Es imposible justificar esta abominación como una «medida justa» de un «dios de amor». Ningún ser real o imaginario que cometiera tales actos de sadismo podría ser considerado «bueno». En palabras sencillas, este dios es un demonio espantable. Si la Biblia es inerrante, el dios que la dictó es un monstruo abominable, inmoral, injusto, homicida, infanticida, y sádico. No se puede tildar de amoroso a semejante monstruo, cuyas atrocidades hacen palidecer los crímenes de Hitler, Stalin, y cualquier terrorista moderno. Al comparar con la primera cita de este artículo, se entiende cuán justificado estaba el «hereje» Marción, al eliminar de su cánon bíblico la totalidad del Antiguo Testamento del sádico dios Yahvé.
Los creyentes fundamentalistas presentan dos justificaciones ante esta situación. En primer lugar, argumentan que Yahvé es «soberano»: Él habría creado a la humanidad, y por tanto, podría utilizarla como le viniera en gana. Para una persona ética, esta justificación es aterrorizante: cualquier persona que la esgrimiera podría justificar de la misma forma los más terribles genocidios por la única razón del poder del genocida. Su dios es un hitler cósmico que, por tener el poder de hacerlo, puede ensañarse y hacer uso de personas inocentes según le venga en gana. Una deidad tan atroz como esta, si existiera, sería indigna de ser adorada por cualquier persona buena y justa. Quien a sabiendas de tales atrocidades, adorara a semejante deidad homicida para «ganarse la vida eterna obedeciendo al Señor» sería tan inmoral como quien respaldara a Hitler conociendo sus genocidios, sólo para ganarse los favores del Führer. Una actitud así alcanzaría las cotas más altas de mezquindad a las que puede llegar el ser humano.
En segundo lugar, algunos creyentes apuntan a la gran cantidad de bendiciones que envía Yahvé a quien le obedece; bendiciones que aparecen justo antes del pasaje citado. Esta defensa sería análoga a mostrar el gran bienestar que brindó Hitler al pueblo ario alemán, sus avances en obras públicas, y la gran calidad de vida que brindó a sus conciudadanos, para justificar el genocidio sistemático que realizó sobre millones de judíos y otras minorías de «razas inferiores» en sus cámaras de gas y hornos crematorios. Tales «buenas obras» de ninguna forma eliminarían la actitud sangrienta, sádica y promotora del canibalismo de padres sobre hijos, de la cual hace gala el «buen dios Yahvé».
Hay una tercera actitud: si se reconoce que dicho pasaje sólo representa la falsa cosmovisión sádica y genocida de una época primitiva; que dicho pasaje es horripilante, macabro y profundamente inmoral, entonces se debe reconocer que de la misma forma, páginas enteras de la Biblia pueden estar repletas de mandamientos falsos e inherentemente malos. En realidad, gran parte de ella es abominable desde el punto de vista de una ética civilizada, como verificará cualquiera que se tome la molestia de leerla o de consultar fuentes críticas. La Biblia y por ende, el cristianismo que la toma como base, no pueden ser patrón moral en ninguna sociedad civilizada moderna. No deben ser la base ética de las legislaciones.
Es hora de llamar a las cosas por su nombre. La deidad del judaismo, el cristianismo y el Islam es sólo un bárbaro y sádico dios tribal sobredimensionado durante milenios por altos jerarcas religiosos que tienen como negocio el dedicarse a propagar estos engaños.
Para Hernan Toro:
Tu Comentario: La deidad del judaismo, el cristianismo y el Islam es sólo un bárbaro y sádico dios tribal sobredimensionado durante milenios por altos jerarcas religiosos que tienen como negocio el dedicarse a propagar estos engaños.
Rpta: Mi hermano, según tus escritos, me parece que eres un Adventista. Caundo te identificas al foro, sería muy apropiado que digamos a que creencia pertenecemos para así saber con quien estamos tratando.
Me parece un poco no muy sensato de algunos de vosotros que hasta esconden sus identidades, y con más razón sus creencias. Si te fijas en el foro habemos unos que nos identificamos tal como soldado de un ejercito celestial, Arkangel, y otros sobrenombres que se ponen, en vez de usar sus NOMBRES verdaderos. Digo yo, ¿que es lo que esconden? y si se esconden, ¿porque lo hacen?
Queremos sinceridad mi hermano en este foro. Al fin y al cabo de Dios no nos podemos esconder. A que ser sinceros con nosotros mismos, ¿les parece?
Misericordia, Dios mío, por tu bondad,
por tu inmensa compasión borra mi culpa;
4lava del todo mi delito,
limpia mi pecado.
5Pues yo reconozco mi culpa,
tengo siempre presente mi pecado:
6contra ti, contra ti solo pequé,
cometí la maldad que aborreces.
En la sentencia tendrás razón,
en el juicio resultarás inocente.
7Mira, en la culpa nací,
pecador me concibió mi madre.
8Te gusta un corazón sincero,
y en mi interior me inculcas sabiduría.
9Rocíame con el hisopo: quedaré limpio;
lávame: quedaré más blanco que la nieve.
10Hazme oír el gozo y la alegría,
que se alegren los huesos quebrantados.
11Aparta de mi pecado tu vista,
borra en mí toda culpa.
12Oh Dios, crea en mí un corazón puro,
renuévame por dentro con espíritu firme;
13no me arrojes lejos de tu rostro,
no me quites tu santo espíritu.
14Devuélveme la alegría de tu salvación,
afiánzame con espíritu generoso:
15enseñaré a los malvados tus caminos,
los pecadores volverán a ti.
16Líbrame de la sangre, oh Dios,
Dios, Salvador mío,
y cantará mi lengua tu justicia.
17Señor, me abrirás los labios,
y mi boca proclamará tu alabanza.
18Los sacrificios no te satisfacen:
si te ofreciera un holocausto, no lo querrías.
19Mi sacrificio es un espíritu quebrantado;
un corazón quebrantado y humillado,
tú no lo desprecias.
20Señor, por tu bondad, favorece a Sión,
reconstruye las murallas de Jerusalén:
21entonces aceptarás los sacrificios rituales,
ofrendas y holocaustos,
amen.
dice no mataras pero en nombre de la religión se mata a la gente cruzadas inquisición los SUICIDIOS COLECTIVOS PROVOCADOS por las sectas evangélicas guerreros de allá brujas de salen acaso se cometió algún error de transcripción pues el quinto mandamiento seria así SI MATARAS EN NOmbre de Dios
No sólo eso, es que el propio Jehová mata:
1. Un Diluvio Universal que acabó con muchas criaturas inocentes tales como, animales, niños (¿existió alguna vez una población mundial de infantes perversos?) y sobre todo bebés y fetos: GÉNESIS 7 Y 8 2; 2 PEDRO 2:5.
2. Destrucción total de Sodoma y Gomorra, sigo preguntando ¿Existieron alguna vez grupos étnicos cuyas poblaciones infantiles eran perversas en su totalidad? GÉNESIS 19; 2 PEDRO 2:6; JUDAS 1:7
3. Causa directa de la transformación en Estatua de Sal de una mujer inocente (la esposa de Lot): GÉNESIS 19:26.
4. Asesinato de un hombre que se negaba a tener relaciones sexuales con su cuñada viuda, y para evitarlo se masturbaba: GÉNESIS 38:1-10.
5. Plagas, llamadas “Maravillas” por el propio Jehová, hacia seres inocentes de Egipto, tales como ancianos, mujeres, animales y niños (¿Tiene caso sacrificar niños?): ÉXODO 7:1-14, 9:14-16, 10:1-2, 11:7; JUDAS 1:5.
6. Aniquilación (“maravilla”) hacia todos los primogénitos en la tierra de Egipto, incluyendo niños: ÉXODO. 12:29; JUDAS 1:5.
7. Causa directa del extermino de un ejército egipcio, mediante su inmersión en las aguas del Mar Muerto: ÉXODO 14:21-28; JUDAS: 1:5.
8. Desastre por medio de Granizo en campos egipcios: ÉXODO 9:22-25.
9. Plaga hacia seres humanos: NÚMEROS 11:33.
10. Lepra hacía una mujer (Miriam) por intrigar contra Moisés: NÚMEROS 12:1-10.
11. Abrir la Tierra, mediante Moisés, para tragarse a una población entera (con todo y sus niños… ¿perversos?) por rebeldía: NÚMEROS 16:27-33.
12. Genocidio de 250 hombres por incineración: NÚMEROS 16:35.
13. Genocidio de 14,700 personas por medio de una plaga mortal: NÚMEROS 16:49.
14. Ataque mortal de serpientes de fuego hacia pobladores israelitas (¿cómo no se le ocurrió a Hitler?): NÚMEROS 21:6.
15. Genocidio de 24,000 personas por medio de una plaga mortal: NÚMEROS 25:9 –11.
16. Apoyo logístico para masacrar a Sehón, sus hijos, y su pueblo y después saquearlos: DEUTERONOMIO 2: 32-35.
17. Apoyo logístico para masacrar a Og y a todo su pueblo DEUTERONOMIO 3:2-3.
18. Apoyo Logístico para masacrar y saquear a 6 pueblos: DEUTERONOMIO 20:1 al 21:3.
19. Intimidación masiva hacía el pueblo Israelí: DEUTERONOMIO:28 (todo el capítulo).
20. Posesión del cuerpo de un hombre (Sansón) para despedazar a un león cachorro JUECES 14:5-6.
21. Posesión del cuerpo de un hombre (Sansón) para masacrar a 30 hombres: JUECES 14:19 .
22. Aplicación de tumores en las ingles de los Filisteos (plaga): 1 SAMUEL 5:6-9.
23. Genocidio de 50,070 hombres de Beth-Semes: 1SAMUEL 6:19.
25. Aplastamiento con grandes trozos de granizo de un número indefinido de hombres: JOSUÉ 10:10-11.
26. Asesinato de los “hombres más robustos” de Israel: SALMOS 78:21-31.
27. Castigo con sequía a Israel por 3 años consecutivos a causa de un acto de Saúl: 2 SAMUEL 21:1.
28. Asesinato de dos varones justos: 1 REYES:2:32.
29. Ordena a Jehú asesinar a sobrevivientes de Achâb, mediante Elías: 2 REYES 10:17.
30. Asesinato de Er, hijo de Judá: 1 CRÓNICAS 2:3.
31. Apoyo logístico a los Hijos de Rubén y de Gad para arrasar con cuatro pueblos. 1 CRÓNICAS 5:18-22.
32. Apoyo logístico a David para herir a los Filisteos y a su ganado: 1 SAMUEL 23:2-5
33. Mas Apoyo logístico a David para herir a los Filisteos: 2 SAMUEL 5:23-25.
34. Asesinato de Uzza: 2 SAMUEL6:7.
35. Ordenar Daños a la casa de Achâb por venganza a Jezabel: 2 REYES:9:7.
36. Asesinato de Joachaz mediante una terrible y cruel enfermedad: 2 CRÓNICAS 21:17-19
37. Aplicación de lepra a Azarías: 2 CRÓNICAS 26:20.
38. Amenaza de destrucción al pueblo de Israel: ISAÍAS 10:20-27
39. Amenaza a Pashur de muerte, destrucción y saqueo a sus seres queridos y pueblo, por haber herido a Jeremías: JEREMÍAS 20:1-8.
40. Agresión contra dos falsos profetas: JEREMÍAS 29:21.
41. Derivado de la envidia, amenaza de destrucción, muerte y saqueo al pueblo de Jacob (Sión y Samaria): AMÓS 6.
42. Agresión, con ceguera y aturdimiento, a caballos de Judá y, con locura, a sus jinetes: ZACARÍAS 12:4.
43. Aplicación de plaga desconocida contra los pueblos contrincantes de Jerusalém: ZACARÍAS :14:12.
44. Intimidación por medio de amenaza de plaga hacia Egipcios: ZACARÍAS 14:18.
45. Asesinato de un bebé como castigo a su padre (David), a quien al parecer, le tuvo sin cuidado: 2 SAMUEL: 12:1-19.
46. Genocidio de 70,000 Israelitas por medio de una peste: 2 SAMUEL 24:15.
47. Aniquilación de 50 hombres con fuego del cielo: 2 REYES 1:10-12.
48. Aplicación de ceguera a los Sirios: 2 REYES: 6:18-19.
49. Asesinato con lepra, a Azarías (Rey): 2 REYES 15:3-5.
50. Genocidio de 185,000 Sirios: 2 REYES 19:35.
51. Órdenes de masacrar a “viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres hasta que no quede uno…”: EZEQUIEL: 9:4-6
52. Aniquilación de seres humanos: DEUTERONOMIO 2:15.
53. Destrucción de las tiendas de Jacob y las fortalezas de la hija de Judá: LAMENTACIONES 2:2.
54. Destrucción masiva de Israel: LAMENTACIONES 2:5.
55. Destrucción masiva de los Cananeos: NÚMEROS: 21:3.
Entonces Pilato, convocando a los principales sacerdotes, a los Gobernantes, y al pueblo, les dijo: Me habéis presentado a éste como un hombre que perturba al pueblo; pero habiéndole interrogado yo delante de vosotros, no he hallado en este hombre delito alguno de aquellos de que le acusáis. Y ni aun Herodes, porque os remití a él; y he aquí, nada digno de muerte ha hecho este hombre. Le soltaré, pues, después de castigarle. Y
tenía necesidad de soltarles uno en cada fiesta. Mas toda la multitud dio voces a una, diciendo: ¡Fuera con éste, y suéltanos a Barrabás! Éste había sido echado en la cárcel por sedición en la ciudad, y por un homicidio. Les habló otra vez Pilato, queriendo soltar a Jesús; pero ellos volvieron a dar voces, diciendo: ¡Crucifícale, crucifícale! Él les dijo por tercera vez: ¿Pues qué mal ha hecho éste? Ningún delito digno de muerte he hallado en él; le castigaré, pues, y le soltaré. Mas ellos instaban a grandes voces, pidiendo que fuese crucificado. Y las voces de ellos y de los principales sacerdotes prevalecieron. Entonces Pilato sentenció que se hiciese lo que ellos pedían;
y les soltó a aquel que había sido echado en la cárcel por sedición y homicidio, a quien habían pedido; y entregó a Jesús a la voluntad de ellos. Y llevándole, tomaron a cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le pusieron encima la cruz para que la llevase tras Jesús. Y le seguía gran multitud del pueblo, y de mujeres que lloraban y hacían lamentación por él. Pero Jesús, vuelto hacia ellas, les d¼o: H¼as de Jerusalén, no lloréis
por mí, sino llorad por vosotras mismas y por vuestros hijos.
Porque he aquí vendrán días en que dirán: Bienaventuradas las estériles, y los vientres que no concibieron, y los pechos que no criaron. Entonces comenzarán a decir a los montes: Caed sobre nosotros; y a los collados: Cubridnos. Porque si en el árbol verde hacen estas cosas, ¿en el seco, qué no se hará? Llevaban también con él a otros dos, que eran malhechores, para ser muertos. Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Y Jesús decía: Padre, perdónalos,
porque no saben lo que hacen.
Ahora te pregunto yo, por que esta historia no, nos la cuentas tambien
ya que fue Dios que tambien lo hizo, Dios fue el culpable de esta muerte!
podrias explicarnos por que Dios permitio esta muerte de este inocente y Justo hombre?
quien tuvo la culpa de esta muerte? y quienes fueron los, que, lo mataron
tuvo un proposito esta muerte? sabemos que fue Dios el responsable de esta muerte y debes contarla tambien.
me parece que desconoces el evangelio y que no conoces a Dios todopoderoso. y estas senalando mas que conociendo el verdadero proposito de todo lo escrito. te reto a que conoscas a Dios. El Gran Rey.
Sabes? la muerte no es nada. pues Dios resucitara a todos estos muertos
en el dia final asi que no tienes por que angustiarte por la muerte de nadie.
angustiate, por ti, por tu alma, por que entiendas el proposito de lo que esta escrito. Crees tu que Dios desea la muerte de la humanidad. por estos ejemplos que segun la biblia describe que la maldad habita aun en la simiente de los hombres, Por eso nuestro deber como padres es; educar a nuestros hijos en el temor y amor a Dios.
para que no acarreen consecuencias dolorosas para sus vidas y que acaso tambien no has leido que los ninos son de Dios.
vivos y muertos pues su palabra dice que el no es Dios de muertos.
si no de vivos.
oh sea mi querido amigo te hablo de la rresurreccion.
entiendes algo de la resurreccion?
por tanto nos amo Dios que dio a su unico hunigenito para que todo aquel que en el cree no se pierda mas tenga vida eterna. san juan 3: 16
Dios saco nuestra vida del anonimato.
por tanto nos amo Dios que dio a su unico hijo hunigenito para que todo aquel que en el cree no se pierda mas tenga vida eterna. san juan 3: 16
Dios saco nuestra vida del anonimato.
Autor: Hernán Toro – Escépticos Colombia
[email protected]
Todos los grupos cristianos aceptan la Biblia como texto inspirado por su dios Yahvé (también conocido como Jehová). Para los cristianos protestantes de corte norteamericano, no sólo está inspirada por su divinidad sino que es inerrante en todos los campos, hasta el punto de considerarla «el manual de vida» que Yahvé habría dejado para la humanidad por siempre.
Basándose supuestamente en ella, y escogiendo con cuidado cuáles textos leer en sus púlpitos y cuáles ocultar, los cristianos afirman que su dios es infinitamente bueno, justo y misericordioso. Llegan a decir que «Dios es Amor». Todos ellos sostienen esta visión neotestamentaria: Dios es un Padre amoroso:
«Oísteis que fué dicho: Amarás á tu prójimo, y aborrecerás á tu enemigo. Mas yo os digo: Amad á vuestros enemigos, bendecid á los que os maldicen, haced bien á los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; Para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos: que hace que su sol salga sobre malos y buenos, y llueve sobre justos é injustos. Porque si amareis á los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿no hacen también lo mismo los publicanos? Y si abrazareis á vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿no hacen también así los Gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.» (Mateo 5, 43-48)2
Los creyentes basan su fe en Yahvé como un dios bueno y justo en textos neotestamentarios como este. Pastores, curas y predicadores de toda laya los repiten a diario en sus iglesias, para convencer a sus fieles de que su dios es paradigma de amor y justicia; la base perfecta de cualquier sistema ético, moral o legal. Pero… ¿esto es cierto? ¿el dios de la Biblia es en verdad justo, bueno, «lento a la ira y rico en clemencia»?
Quien no se conforma con escuchar al pastor en su iglesia -quien lee la Biblia personalmente- encuentra numerosos textos que muestran lo contrario. Aunque se podrían citar cientos de pasajes parecidos, sólo se muestra uno que representa bien a Yahvé; el relato se explica solo pero aún así, se harán breves comentarios sobre algunas partes que se resaltan.
Deuteronomio 28,15-51:
«Pero si no obedeces la voz de Yavé, tu Dios, y no pones en práctica todos sus mandamientos y normas que hoy te prescribo, vendrán sobre ti todas estas maldiciones:
Maldito serás en la ciudad y en el campo. Maldita será tu canasta de frutos y tu reserva de pan. Maldito el fruto de tus entrañas y el fruto de tus tierras, los partos de tus vacas y las crías de tus ovejas. Maldito serás cuando salgas y maldito también cuando vuelvas.
Yavé mandará la desgracia, la derrota y el susto sobre todo lo que tus manos toquen, hasta que seas exterminado, y perecerás en poco tiempo por las malas acciones que cometiste, traicionando a Yavé. El hará que se te pegue la peste hasta que desaparezcas de este país que, hoy, pasa a ser tuyo. Yavé te castigará con tuberculosis, fiebre, inflamación, quemaduras, tizón y roya del trigo, que te perseguirán hasta que mueras.
El cielo que te cubre se volverá de bronce, y la tierra que pisas, de hierro. En vez de lluvia, Yavé te mandará cenizas y polvo, que caerán del cielo hasta que te hayan barrido.
Yavé hará que seas derrotado por tus enemigos. Por un camino irás a pelear en su contra y por siete caminos huirás de ellos. Al verte se horrorizarán todos los pueblos de la tierra.
Tu cadáver servirá de comida a todas las aves del cielo y a todas las bestias de la tierra, sin que nadie las corra. Te herirá Yavé con las úlceras y plagas de Egipto, con tumores, sarna y tiña, de las que no podrás sanar.
Te castigará Yavé con la locura, la ceguera y la pérdida de los sentidos. Andarás a tientas en pleno mediodía, como anda el ciego en la oscuridad, y fracasarás en tus empresas. Siempre serás un hombre oprimido y despojado, sin que nadie salga en tu defensa.
Tendrás una prometida y otro hombre la hará suya. Edificarás una casa y no la podrás habitar. Plantarás una viña y no comerás sus uvas. Tu buey será sacrificado delante de ti y no comerás de él. Ante tus ojos te robarán tu burro y no te lo devolverán, tus ovejas serán entregadas a tus enemigos y nadie te defenderá.
Tus hijos y tus hijas serán entregados a pueblos extranjeros y enfermarás con tanto mirar hacia ellos, pero no podrás hacer nada. El fruto de tus campos, todos tus esfuerzos, los comerá un pueblo que no conoces y tú no serás más que un explotado y oprimido toda la vida. Te volverás loco por lo que veas. Yavé te herirá con úlceras malignísimas en las rodillas y en las piernas, de las que no podrás sanar, desde la planta de los pies hasta la coronilla de tu cabeza. Yavé te llevará a ti y al rey que tú hayas elegido a una nación que ni tú ni tus padres conocían, y allí servirás a otros dioses de piedra y de madera. Andarás perdido, siendo el juguete y la burla de todos los pueblos donde Yavé te llevará.
Echarás en tus campos mucha semilla y será muy poco lo que coseches, porque la langosta lo devorará. Plantarás una viña y la cultivarás, pero no beberás vino ni comerás uvas, porque los gusanos la roerán. Tendrás olivos por todo tu territorio, pero no te darán ni siquiera aceite con que ungirte, porque se caerán las aceitunas y se pudrirán.
Tendrás hijos e hijas, pero no serán para ti, porque se los llevarán cautivos . Todos los árboles y frutos de tu tierra serán atacados por los insectos. El forastero que vive contigo se hará cada día más rico, y tú cada día serás más pobre. El te prestará y tú tendrás que pedir prestado; él estará a la cabeza y tú a la cola.
Todas estas maldiciones caerán sobre ti, te perseguirán y oprimirán hasta que hayas sido eliminado, porque no escuchaste la voz de Yavé, tu Dios, ni guardaste sus mandamientos ni las normas que te ordenó. Se apegarán a ti y a tus descendientes para siempre y serán una señal asombrosa a la vista de todos.
Por no haber servido con gozo y alegría de corazón a Yavé, tu Dios, cuando nada te faltaba, servirás con hambre, sed, falta de ropa y toda clase de miseria a los enemigos que Yavé enviará contra ti. Ellos pondrán sobre tu cuello un yugo de hierro hasta que te destruyan del todo.
Yavé hará venir contra ti de un país remoto, como un vuelo de águila, a un pueblo cuya lengua no entenderás. Ese pueblo cruel no tendrá respeto por el anciano ni compasión del niño.
Tras leer este texto 3 «inspirado» es imposible sostener que Dios es todo «Amor». Sería una contradicción enorme: se albergarían dos ideas mutuamente excluyentes en la mente, como en el «doblepensar» orwelliano o en las reglas de «La Compañía de Jesús» fundada por Ignacio de Loyola4 . Si Dios fuera «Amor», no habría dejado plasmar estas injusticias en su «Santa Palabra».
Se pueden examinar algunas citas particularmente inquietantes en este discurso:
«Maldito el fruto de tus entrañas»
La maldición cae sobre los hijos de los infractores. Aunque no hayan hecho nada malo, los hijos pagan por los pecados de sus padres. Que un inocente reciba castigo por lo que hacen otros no es moral ni justo. Un dios que castigara así no podría ser base de ningún sistema ético o legal en una sociedad civilizada.
«El cielo que te cubre se volverá de bronce, y la tierra que pisas, de hierro. En vez de lluvia, Yavé te mandará cenizas y polvo, que caerán del cielo hasta que te hayan barrido.»
Si se cree en el texto, todo ser del territorio ocupado por el pecador, plantas, animales y personas, padecerían la sequía enviada como amonestación. Castigar a un culpable con una medida que afecta incontables inocentes es inmoral. Es una respuesta desproporcionada, similar al bombardeo de una ciudad llena de civiles inocentes como retaliación a la acción puntual de algún morador de la ciudad: simple terrorismo.
«Tu cadáver servirá de comida a todas las aves del cielo y a todas las bestias de la tierra, sin que nadie las corra».
Este versículo ahonda en la personalidad de Yahvé. Siendo omnisciente, debería saber que un cadáver no es una persona y no siente nada. Aún así, en su saña decide vengarse hasta del cuerpo inanimado del pecador: ni siquiera le permite una digna sepultura… lo deja como carroña. Sobre un cadáver es imposible hacer justicia; su profanación sólo muestra venganza enfermiza, semejante a la de los paramilitares colombianos que utilizan motosierras para desmembrar campesinos y luego se ponen a jugar fútbol con las cabezas. 5 No extraña que un pueblo que adora mayoritariamente a Yahvé haya generado esta especie de individuos.
«Tendrás una prometida y otro hombre la hará suya».
Aquí se manifiesta el machismo del dios tribal Yahvé. Para castigar al pecador, Yahvé hace que su prometida inocente sea sometida al oprobio de ser poseída por otro hombre. Aquí la injusticia de Yahvé es doble: no sólo oprime a la mujer sino que la utiliza como un objeto, como un medio para castigar a un tercero: no sólo es venganza sobre el pecador, sino utilización sexual de una inocente como medio de venganza.
«Tus hijos y tus hijas serán entregados a pueblos extranjeros y enfermarás con tanto mirar hacia ellos, pero no podrás hacer nada. (…)Tendrás hijos e hijas, pero no serán para ti, porque se los llevarán cautivos».
Yahvé insiste en derramar su venganza sobre los hijos del infractor para hacerlo sufrir. En la nefanda justicia de este dios, es lícito ensañarse con los hijos inocentes para castigar al padre culpable. Es la misma «justicia» de «Los Pepes» (perseguidos por Pablo Escobar) antes de convertirse en las AUC (Autodefensas Unidas de Colombia). Antes de matar a un enemigo, le asesinaban parientes, empleados, e incluso hijos de sus empleados para hacerle experimentar el mayor dolor y pánico posible6 . Es la versión local del conocido aforismo: «démosle primero donde más le duela». Este tipo de «justicia» es sólo una imitación los métodos de Yahvé para saciar su «santa» sed de sangre. Parece que los Pepes sólo seguían el mandato de Jesús de ser «perfectos como el Padre Celestial es perfecto»… perfectos en la venganza insaciable.
«Todas estas maldiciones(…) Se apegarán a ti y a tus descendientes para siempre y serán una señal asombrosa a la vista de todos».
Ahora la venganza se extiende de los hijos a todos los descendientes; la expresión «para siempre» da mejor perspectiva de la naturaleza de Yahvé. Incluso cuando el infractor ya no existe y no puede sufrir por los males que experimenta su familia, Yahvé se ensaña sobre los descendientes, no sólo para saciar su «furia santa», sino para dejar un precedente eterno de lo que le ocurre a los infractores. De nuevo Yahvé usaría incontables inocentes como valla publicitaria de su ira. Otra vez las personas usadas como medio de expresión de la «rabieta» divina.
«Yavé hará venir contra ti de un país remoto, como un vuelo de águila, a un pueblo cuya lengua no entenderás. Ese pueblo cruel no tendrá respeto por el anciano ni compasión del niño».
A medida que avanza el texto, se va haciendo más clara la naturaleza demoníaca del dios que los cristianos proponen como base absoluta de la ética y la moral humana… Aquí, no basta que a los hijos del infractor se les haga pagar; tampoco bastan los descendientes, aunque se los castigue «por siempre»… No: ¡La sed insaciable de sangre de Yahvé exige también los vecinos inocentes del pecador! Alguien peca y Yahvé manda una invasión extranjera que no respeta ni a viejos ni a niños del pueblo del infractor. ¡El pueblo entero paga lo que hace un individuo! Es otro intento infructuoso de ese dios tribal hebreo para aplacar su sed insaciable de sangre. 7
Pero el primer puesto en depravación extrema se lo llevan los versos 52 a 59. Es mejor leerlo en las propias palabras inspiradas por Yahvé:
«Te asediarán en todas tus ciudades, hasta que caigan en todo tu país las murallas más altas y fortificadas en las que tú ponías tu confianza. Quedarás sitiado dentro de tus ciudades en todo el país que te da Yavé, tu Dios. Te comerás el fruto de tus entrañas, la carne de tus hijas e hijos que te haya dado Yavé, en el asedio y angustia a que te reducirá tu enemigo.
El hombre más refinado de tu pueblo se esconderá de su hermano e incluso de su esposa y de los hijos que le queden, negándose a compartir con ellos la carne de los hijos que se estará comiendo, porque nada le quedará durante el asedio y la angustia a que tu enemigo te reducirá en todas tus ciudades. La mujer más tierna y delicada de tu pueblo, tan delicada y tierna que hacía ademanes para posar en tierra la planta de su pie, se esconderá del hombre que se acuesta con ella, e incluso de su hijo o de su hija, mientras come la placenta salida de su seno y a los hijos que dio a luz, por falta de todo otro alimento, cuando tu enemigo te sitie en tus ciudades y te reduzca a la más extrema miseria. Si no guardas ni pones en práctica las palabras de esta Ley tales como están escritas en este libro, y no temes a ese Nombre glorioso y terrible, a Yavé, tu Dios, él te castigará, a ti y a tus descendientes, con plagas asombrosas, plagas grandes y duraderas, enfermedades malignas e incurables».
Un lector ético que haya seguido estos pasajes bíblicos debió pasar por el punto de las bascas hace mucho rato: aquí, Yahvé envía un asedio extranjero que causa tal hambruna, que «hombres refinados y mujeres dulces» del pueblo del infractor se ven en la necesidad de comerse a sus propios hijos. Es de una morbosidad horripilante: no basta que Yahvé derrame su venganza sobre los hijos del infractor, ni sobre sus descendientes, ni siquiera sobre los vecinos inocentes del infractor… ¡también es necesario que estos se coman a sus propios hijos por hambre! 8
Pocas veces, si alguna, se ha llegado a una forma tan escalofriante y macabra de ejecutar una venganza. ¡Hacerle comer su placenta y sus hijos a una mujer inocente, vecina de un infractor, para que pague el infractor! Esta manera de «hacer pagar» no se le ocurrió ni a Pablo Escobar durante la época del Cartel de Medellín. Es imposible justificar esta abominación como una «medida justa» de un «dios de amor». Ningún ser real o imaginario que cometiera tales actos de sadismo podría ser considerado «bueno». En palabras sencillas, este dios es un demonio espantable. Si la Biblia es inerrante, el dios que la dictó es un monstruo abominable, inmoral, injusto, homicida, infanticida, y sádico. No se puede tildar de amoroso a semejante monstruo, cuyas atrocidades hacen palidecer los crímenes de Hitler, Stalin, y cualquier terrorista moderno. Al comparar con la primera cita de este artículo, se entiende cuán justificado estaba el «hereje» Marción, al eliminar de su cánon bíblico la totalidad del Antiguo Testamento del sádico dios Yahvé.
Los creyentes fundamentalistas presentan dos justificaciones ante esta situación. En primer lugar, argumentan que Yahvé es «soberano»: Él habría creado a la humanidad, y por tanto, podría utilizarla como le viniera en gana. Para una persona ética, esta justificación es aterrorizante: cualquier persona que la esgrimiera podría justificar de la misma forma los más terribles genocidios por la única razón del poder del genocida. Su dios es un hitler cósmico que, por tener el poder de hacerlo, puede ensañarse y hacer uso de personas inocentes según le venga en gana. Una deidad tan atroz como esta, si existiera, sería indigna de ser adorada por cualquier persona buena y justa. Quien a sabiendas de tales atrocidades, adorara a semejante deidad homicida para «ganarse la vida eterna obedeciendo al Señor» sería tan inmoral como quien respaldara a Hitler conociendo sus genocidios, sólo para ganarse los favores del Führer. Una actitud así alcanzaría las cotas más altas de mezquindad a las que puede llegar el ser humano.
En segundo lugar, algunos creyentes apuntan a la gran cantidad de bendiciones que envía Yahvé a quien le obedece; bendiciones que aparecen justo antes del pasaje citado. Esta defensa sería análoga a mostrar el gran bienestar que brindó Hitler al pueblo ario alemán, sus avances en obras públicas, y la gran calidad de vida que brindó a sus conciudadanos, para justificar el genocidio sistemático que realizó sobre millones de judíos y otras minorías de «razas inferiores» en sus cámaras de gas y hornos crematorios. Tales «buenas obras» de ninguna forma eliminarían la actitud sangrienta, sádica y promotora del canibalismo de padres sobre hijos, de la cual hace gala el «buen dios Yahvé».
Hay una tercera actitud: si se reconoce que dicho pasaje sólo representa la falsa cosmovisión sádica y genocida de una época primitiva; que dicho pasaje es horripilante, macabro y profundamente inmoral, entonces se debe reconocer que de la misma forma, páginas enteras de la Biblia pueden estar repletas de mandamientos falsos e inherentemente malos. En realidad, gran parte de ella es abominable desde el punto de vista de una ética civilizada, como verificará cualquiera que se tome la molestia de leerla o de consultar fuentes críticas. La Biblia y por ende, el cristianismo que la toma como base, no pueden ser patrón moral en ninguna sociedad civilizada moderna. No deben ser la base ética de las legislaciones.
Es hora de llamar a las cosas por su nombre. La deidad del judaismo, el cristianismo y el Islam es sólo un bárbaro y sádico dios tribal sobredimensionado durante milenios por altos jerarcas religiosos que tienen como negocio el dedicarse a propagar estos engaños.
Tu Comentario: La deidad del judaismo, el cristianismo y el Islam es sólo un bárbaro y sádico dios tribal sobredimensionado durante milenios por altos jerarcas religiosos que tienen como negocio el dedicarse a propagar estos engaños.
Rpta: Mi hermano, según tus escritos, me parece que eres un Adventista. Caundo te identificas al foro, sería muy apropiado que digamos a que creencia pertenecemos para así saber con quien estamos tratando.
Me parece un poco no muy sensato de algunos de vosotros que hasta esconden sus identidades, y con más razón sus creencias. Si te fijas en el foro habemos unos que nos identificamos tal como soldado de un ejercito celestial, Arkangel, y otros sobrenombres que se ponen, en vez de usar sus NOMBRES verdaderos. Digo yo, ¿que es lo que esconden? y si se esconden, ¿porque lo hacen?
Queremos sinceridad mi hermano en este foro. Al fin y al cabo de Dios no nos podemos esconder. A que ser sinceros con nosotros mismos, ¿les parece?
Dios los bendiga