Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Históricos > Rut > Booz se casa con Rut (8:4:1 - 9:1:28)
Boaz subió a la puerta de la ciudad y se sentó allí. Y he aquí que pasaba por allí aquel pariente redentor del cual había hablado Boaz, y éste le dijo: —¡Eh, Fulano! ¡Ven acá, y siéntate! El fue y se sentó.
Entonces Boaz tomó a diez hombres de los ancianos de la ciudad y les dijo: —Sentaos aquí. Y ellos se sentaron.
Entonces dijo al pariente redentor: —Noemí, que ha vuelto de los campos de Moab, vende la parte del campo que tuvo nuestro hermano Elimelec.
Yo pensé hacértelo saber y decirte que la adquieras, en presencia de los que están sentados aquí y en presencia de los ancianos de mi pueblo. Si quieres redimir, redime. Si no quieres redimir, decláramelo para que yo lo sepa; porque no hay otro que pueda redimir excepto tú, y yo, después de ti. El le respondió: —Yo redimiré.
Entonces Boaz dijo: —El mismo día que adquieras el campo de manos de Noemí, deberás también adquirir a Rut la moabita, mujer del difunto, para restaurar el nombre del difunto a su heredad.
Entonces el pariente redentor respondió: —No puedo redimir para mí, no sea que perjudique mi propia heredad. Redime tú para ti lo que yo debería redimir, porque yo no puedo redimirlo.
Había desde antaño la costumbre en Israel, tocante a la redención y las transacciones, que para dar vigencia a cualquier asunto uno se quitaba la sandalia y la daba al otro. Y esto servía de testimonio en Israel.
Y el pariente redentor dijo a Boaz: —Adquiérelo tú. Luego se quitó la sandalia.
Entonces Boaz dijo a los ancianos y a todo el pueblo: —Vosotros sois testigos hoy de que adquiero de mano de Noemí todas las cosas que pertenecieron a Elimelec y todo lo de Quelión y de Majlón,
y de que también adquiero, para que sea mi mujer, a Rut la moabita, que fuera mujer de Majlón, para restaurar el nombre del difunto a su heredad, a fin de que el nombre del difunto no se borre de entre sus hermanos ni de la puerta de su ciudad. Vosotros sois testigos hoy.
Todos los del pueblo que estaban presentes en la puerta con los ancianos dijeron: —Somos testigos. Jehovah haga a la mujer que entra en tu casa, como a Raquel y a Lea, quienes juntas edificaron la casa de Israel. ¡Que te hagas poderoso en Efrata, y tengas renombre en Belén!
Con los descendientes que Jehovah te dé por medio de esta joven, sea tu casa como la casa de Fares, el cual Tamar dio a Judá.
Boaz tomó a Rut, y ella fue su mujer. El se unió a ella, y Jehovah le concedió que concibiera y diera a luz un hijo.
Entonces las mujeres decían a Noemí: —¡Alabado sea Jehovah, que hizo que no te faltase hoy un pariente redentor! ¡Que su nombre sea celebrado en Israel!
El restaurará tu vida y sustentará tu vejez, porque tu nuera, que te ama y te es mejor que siete hijos, lo ha dado a luz.
Noemí tomó al niño, lo puso en su seno y fue su ama.
Y las vecinas le dieron nombre, diciendo: —¡Un hijo le ha nacido a Noemí! Y le pusieron por nombre Obed. El fue el padre de Isaí, padre de David.
Esta es la historia de los descendientes de Fares: Fares engendró a Hesrón.
Hesrón engendró a Ram. Ram engendró a Aminadab.
Aminadab engendró a Najsón. Najsón engendró a Salmón.
Salmón engendró a Boaz. Boaz engendró a Obed.
Obed engendró a Isaí, e Isaí engendró a David.
Pero su rival la irritaba continuamente para humillarla, porque Jehovah había cerrado su matriz.
Así hacía cada año, cuando subía a la casa de Jehovah; ella la irritaba, por lo cual Ana lloraba y no comía.
Y Elcana su marido le dijo: —Ana, ¿por qué lloras? ¿Por qué no comes? ¿Por qué está afligido tu corazón? ¿No soy yo para ti mejor que diez hijos?
Después de haber comido y bebido en Silo, Ana se levantó; y mientras el sacerdote Elí estaba sentado en una silla junto al poste de la puerta del templo de Jehovah,
ella oró a Jehovah con amargura de alma y lloró mucho.
E hizo un voto diciendo: —Oh Jehovah de los Ejércitos, si te dignas mirar la aflicción de tu sierva, te acuerdas de mí y no te olvidas de tu sierva, sino que le das un hijo varón, entonces yo lo dedicaré a Jehovah por todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza.
Sucedió que mientras ella oraba largamente delante de Jehovah, Elí observaba la boca de ella.
Ana hablaba en su corazón; sólo se movían sus labios, pero no se oía su voz. Elí creyó que ella estaba ebria.
Y le preguntó Elí: —¿Hasta cuándo vas a estar ebria? ¡Aparta de ti el vino!
Ana respondió y dijo: —No, señor mío; yo soy una mujer atribulada de espíritu. No he bebido vino ni licor, sino que he derramado mi alma delante de Jehovah.
No pienses que tu sierva es una mujer impía. Es por mi gran congoja y por mi aflicción que he hablado hasta ahora.
Elí respondió y le dijo: —Vé en paz, y que el Dios de Israel te conceda la petición que le has hecho.
Ella dijo: —Que tu sierva halle gracia ante tus ojos. La mujer siguió su camino. Después comió y no estuvo más triste.
Se levantaron de madrugada y adoraron delante de Jehovah. Y volviéndose, llegaron a su casa en Ramá. Elcana conoció a Ana su mujer, y Jehovah se acordó de ella.
Y sucedió que a su debido tiempo, Ana concibió y dio a luz un hijo. Y le puso por nombre Samuel, diciendo: “Porque se lo pedí a Jehovah.”
Después aquel hombre, Elcana, subió con toda su familia, para ofrecer a Jehovah el sacrificio anual y cumplir su voto.
Pero Ana no fue, sino que dijo a su marido: —Tan pronto como el niño sea destetado, lo llevaré para que sea presentado ante Jehovah y se quede allí para siempre.
Y Elcana su marido le respondió: —Haz lo que te parezca bien; quédate hasta que lo destetes. ¡Sólo que Jehovah cumpla la palabra que sale de tu boca! Así que la mujer se quedó y amamantó a su hijo hasta que lo destetó.
Y después de haberlo destetado, lo llevó consigo y lo trajo a la casa de Jehovah en Silo, junto con un toro de tres años, un efa de harina y una vasija de vino. El niño era pequeño.
Después de degollar el toro llevaron el niño a Elí.
Y ella dijo: —¡Oh, señor mío! Vive tu alma, oh señor mío, que yo soy aquella mujer que estuvo de pie aquí, junto a ti, orando a Jehovah.
Por este niño oraba, y Jehovah me ha concedido lo que le pedí.
Por eso yo también lo dedico a Jehovah; y estará dedicado a Jehovah todos los días de su vida. Y adoraron allí a Jehovah.
10,127 visitas
26-11-2009 a las 17:49
es vídeo no historia no escrita
[contesta a alejandra]
13-06-2012 a las 23:36
si su nonbre es jesus
[contesta a thaibelin]
28-06-2012 a las 21:10
Para todas las chicas que están en una prisa por tener novio o casarse, un consejo bíblico: “. Ruth esperó pacientemente por su compañero de Booz” Mientras que usted está esperando en su Booz, no se conforman con cualquiera de sus parientes: Broke-az, Po-az, Lyin-az, Cheating-az, Dumb-az, Drunk-az, Cheap-az, lockedup-az, goodfornothing-az, Lazy az-, y sobre todo su primo tercero Beatinyo-az. Espera en el Booz y asegurarse de que respeta Yoaz …
[contesta a Ma Rosa]