Biblia cristiana > Nuevo Testamento > Evangelios > San Mateo > La gran comisión (40:28:16 - 41:15:20)
Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había mandado.
Cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaron.
Jesús se acercó a ellos y les habló diciendo: “Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra.
Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándoles en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo,
y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado. Y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.”
Entonces Pilato, queriendo satisfacer al pueblo, les soltó a Barrabás y entregó a Jesús, después de azotarle, para que fuese crucificado.
Entonces los soldados le llevaron dentro del atrio, que es el Pretorio, y convocaron a toda la compañía.
Le vistieron de púrpura; y habiendo entretejido una corona de espinas, se la pusieron
y comenzaron a aclamarle: —¡Viva, rey de los judíos!
También le golpeaban la cabeza con una caña, le escupían y puestos de rodillas le rendían homenaje.
Cuando se hubieron burlado de él, le quitaron el manto de púrpura y le pusieron su propia ropa. Entonces le sacaron para crucificarle.