Juicio de Jehová contra los soberbios

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Proféticos > Isaías > Juicio de Jehová contra los soberbios (23:2:5 - 23:2:22)

¡Oh casa de Jacob, venid y caminemos a la luz de Jehovah!

Ciertamente tú has rechazado a tu pueblo, la casa de Jacob, porque ellos están llenos de costumbres orientales y de adivinos, como los filisteos; y hacen tratos con los hijos de extranjeros.

Su tierra se ha llenado de plata y de oro, y sus tesoros no tienen fin. También su tierra se ha llenado de caballos, y sus carros son innumerables.

Además, su tierra se ha llenado de ídolos. Adoran la obra de sus manos, lo que sus dedos han hecho.

Así se ha postrado el hombre; el ser humano se ha rebajado. Por tanto, no los perdones.

Métete en la roca; escóndete en el polvo ante la temible presencia de Jehovah y ante el esplendor de su majestad.

Los ojos altivos del hombre serán humillados, y la soberbia del ser humano será postrada. Sólo Jehovah será enaltecido en aquel día.

Porque el día de Jehovah de los Ejércitos vendrá contra todo arrogante y altivo, y contra todo el que se ha enaltecido, el cual será humillado.

Vendrá contra todos los cedros del Líbano, altos y erguidos, y contra todas las encinas de Basán.

Vendrá contra todas las altas montañas y contra todas las colinas elevadas.

Vendrá contra toda torre alta y contra todo muro fortificado,

contra todas las naves de Tarsis y contra todos los barcos lujosos.

La altivez del hombre será postrada; la soberbia del ser humano será humillada. Sólo Jehovah será enaltecido en aquel día,

y los ídolos desaparecerán por completo.

Los hombres se meterán en las cavernas de las peñas y en las aberturas de la tierra, a causa de la temible presencia de Jehovah y del esplendor de su majestad, cuando se levante para hacer temblar la tierra.

En aquel día los hombres arrojarán a los topos y a los murciélagos sus ídolos de plata y sus ídolos de oro que habían hecho para adorarlos,

a fin de meterse en las grietas de las rocas y en las hendiduras de las peñas, a causa de la temible presencia de Jehovah y del esplendor de su majestad, cuando Jehovah se levante para hacer temblar la tierra.

Dejad de confiar en el hombre, cuyo hálito está en su nariz; pues, ¿de qué estima es digno?




Juicio de Jehová contra Judá y Jerusalén

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Proféticos > Isaías > Juicio de Jehová contra Judá y Jerusalén (23:3:1 - 23:3:15)

Porque he aquí que el Señor Jehovah de los Ejércitos quitará de Jerusalén y de Judá la provisión y el sustento: toda provisión de pan y toda provisión de agua.

Quitará al valiente y al hombre de guerra, al juez y al profeta, al adivino y al anciano,

al jefe de cincuenta y al hombre respetable, al consejero y al excelente artesano, y al experto encantador.

Les pondré muchachos por magistrados, y los caprichosos se enseñorearán de ellos.

En medio del pueblo el hombre oprimirá al hombre, y cada cual a su prójimo. El joven será insolente con el anciano, y el ruin con el noble.

Cuando alguno eche mano de su hermano en la casa de su padre y le diga: “Tú que tienes ropa, sé nuestro jefe y toma en tus manos esta ruina,”

él alzará la voz en aquel día diciendo: “Yo no seré sanador, pues en mi casa no hay comida ni vestido. No me pongáis por jefe del pueblo.”

Porque Jerusalén ha tropezado, y Judá ha caído; pues la lengua de ellos y sus obras son contrarias a Jehovah y desafían la presencia de su majestad.

Su parcialidad los acusa. Como Sodoma, expresan su pecado y no lo disimulan. ¡Ay de ellos, porque para sí mismos han producido el mal!

Decid a los justos que les irá bien, que comerán del fruto de sus hechos.

¡Ay de los impíos! Les irá mal, porque les será hecho conforme a las obras de sus manos.

¡Oh pueblo mío! Sus opresores son muchachos, y mujeres se enseñorean de él. Pueblo mío, los que te guían te hacen errar y confunden el rumbo de tus caminos.

Jehovah está de pie para litigar; está a punto de juzgar a su pueblo.

Jehovah entrará en juicio contra los ancianos y contra los magistrados de su pueblo. “Porque vosotros habéis consumido la viña, y el despojo del pobre está en vuestras casas.

¿Qué motivos tenéis para aplastar a mi pueblo y moler las caras de los pobres?,” dice el Señor Jehovah de los Ejércitos.




Juicio contra las hijas de Sion

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Proféticos > Isaías > Juicio contra las hijas de Sion (23:3:16 - 23:4:1)

Asimismo dijo Jehovah: “Por cuanto las hijas de Sion son altivas, andan con el cuello erguido, lanzan miradas seductoras, caminan zapateando y hacen resonar los adornos de sus pies,

el Señor pelará con tiña la cabeza de las hijas de Sion; Jehovah desnudará sus frentes.”

En aquel día el Señor quitará los adornos de los tobillos, las diademas, las lunetas,

los aretes, los brazaletes, los velos,

los adornos de la cabeza, los adornos de los pies, las cintas, los frasquitos de perfume, los amuletos,

los anillos, los joyeles de la nariz,

las ropas festivas, los mantos, los pañuelos, los bolsos,

los espejos, la ropa íntima, los turbantes y las mantillas.

Y sucederá que habrá hediondez en lugar de los perfumes, soga en lugar de cinturón, rapadura en lugar de los arreglos del cabello. En lugar de ropa fina habrá ceñidor de cilicio; porque en lugar de belleza habrá vergüenza.

Tus hombres caerán a espada, y tu poderío caerá en la batalla.

Sus puertas lamentarán y se enlutarán; y abandonada, ella se sentará en tierra.

En aquel tiempo siete mujeres echarán mano de un hombre y le dirán: “Nosotras comeremos nuestro propio pan y vestiremos nuestras propias ropas; solamente permite que seamos llamadas por tu nombre. Quita nuestra afrenta.”




Futuro glorioso de Jerusalén

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Proféticos > Isaías > Futuro glorioso de Jerusalén (23:4:2 - 23:4:6)

En aquel día el retoño de Jehovah será hermoso y glorioso, y el fruto de la tierra será el orgullo y el esplendor de los sobrevivientes de Israel.

Acontecerá que el que se quede en Sion, como el que sea dejado en Jerusalén, será llamado santo; todos los que estén inscritos para la vida en Jerusalén.

Así será cuando el Señor lave la inmundicia de las hijas de Sion, y elimine la sangre de en medio de Jerusalén, con espíritu de juicio y con espíritu consumidor.

Entonces sobre todo lugar del monte Sion y sobre sus asambleas, Jehovah creará nube y humo de día, y resplandor de fuego llameante de noche. Porque sobre todos habrá una cubierta de gloria,

y habrá de día un cobertizo para dar sombra ante el calor abrasador, y para refugio y protección de la tormenta y del aguacero.




Parábola de la viña

Imagen Parábola de la viña 1
Enviado por Loarca

Biblia cristiana > Antiguo Testamento > Libros Proféticos > Isaías > Parábola de la viña (23:5:1 - 23:5:7)

Cantaré a mi amigo la canción de mi amado acerca de su viña: Mi amigo tenía una viña en una fértil ladera.

La había desherbado y despedregado. Luego había plantado en ella vides escogidas. Había edificado en ella una torre y también había labrado un lagar. Esperaba que diese uvas buenas, pero dio uvas silvestres.

“Ahora pues, oh habitantes de Jerusalén y hombres de Judá, juzgad entre mí y mi viña.

¿Qué más se podía haber hecho por mi viña que yo no haya hecho en ella? ¿Por qué, pues, esperando yo que diese uvas buenas, ha dado uvas silvestres?

Ahora pues, os daré a conocer lo que yo haré a mi viña: Quitaré su cerco, y será consumida; romperé su vallado, y será pisoteada.

La convertiré en una desolación; no será podada ni cultivada. Crecerán espinos y cardos, y mandaré a las nubes que no derramen lluvia sobre ella.”

Ciertamente la viña de Jehovah de los Ejércitos es la casa de Israel, y los hombres de Judá son su placentero vergel. Esperaba el derecho, y he aquí la vileza; esperaba la justicia, y he aquí el clamor.