Biblia cristiana > Nuevo Testamento > Evangelios > San Mateo > Los dos cimientos (40:7:24 - 40:7:29)
“Cualquiera, pues, que me oye estas palabras y las hace, será semejante a un hombre prudente que edificó su casa sobre la peña.
Y cayó la lluvia, vinieron torrentes, soplaron vientos y golpearon contra aquella casa. Pero ella no se derrumbó, porque se había fundado sobre la peña.
“Pero todo el que me oye estas palabras y no las hace, será semejante a un hombre insensato que edificó su casa sobre la arena.
Cayó la lluvia, vinieron torrentes, y soplaron vientos, y azotaron contra aquella casa. Y se derrumbó, y fue grande su ruina.”
Y aconteció que cuando Jesús terminó estas palabras, las multitudes estaban maravilladas de su enseñanza;
porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.